Anorexia Nerviosa

La Anorexia nerviosa forma parte junto con la bulimia, el trastorno de evitación de la ingestión de alimentos, la obesidad y el trastorno de atracones, de los denominados Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA).
Las características esenciales consisten en el rechazo a mantener un peso corporal mínimo normal, en un miedo intenso a ganar peso y en una alteración significativa de la percepción y de la forma y tamaño del cuerpo. Además las mujeres afectadas de este trastorno, si han pasado la menarquia, sufren amenorrea.

El termino de anorexia es equivoco, porque solo en algunas ocasiones aparece una pérdida del apetito.

¿Es frecuente que un adolescente desarrolle una anorexia nerviosa?

Incidencia de la anorexia nerviosa

Es un trastorno que en los últimos años ha aumentado su incidencia.

Los estudios de prevalencia en adolescentes revelan que el 0,5 – 1 % de los adolescentes cumplen todos los criterios para un diagnóstico de anorexia nerviosa. No obstante, es bastante frecuente que estos no presenten el trastorno completo, son los casos que se denominan anorexia no especificada, anorexia parcial o anorexia en evolución y que deben ser igualmente tratadas.

Edades en las que puede aparecer

La anorexia raras veces se inicia antes de la pubertad. Si bien es cierto que en la infancia pueden aparecer también graves trastornos de la alimentación como la anorexia del lactante y la anorexia infantil, la pica, el trastorno por rumiación, los vómitos psicógenos, la potomanía, el enanismo psicógeno, la obesidad etc.

El inicio de esta enfermedad suele ser entre los 13 y los 18 años y la edad promedio de aparición son los 17 años, siendo muy rara la aparición en mujeres de más de 40 años.

Cuando la anorexia nerviosa aparece antes de la pubertad el pronóstico suele ser menos favorable, pues se relaciona con una mayor gravedad de los trastornos mentales asociados.

Influencia de la cultura, el sexo, situación socioeconómica y patrón familiar en su aparición

La anorexia nerviosa se produce con más frecuencia en los adolescentes de las clases medias y altas de los países industrializados.

Su prevalencia es mayor en las sociedades industriales, en las que abunda la comida y en el que estar más delgado se relaciona estrechamente con el atractivo físico. En sociedades, culturas o familias en las que esto no es así, la restricción alimentaria puede no ser por la distorsión de la imagen corporal, sino por malestar epigástrico o por aversión a los alimentos.

Cuando personas de otras culturas con escasa prevalencia se trasladan a lugares en los que este trastorno es más prevalente, pueden presentar la enfermedad al asimilar en su ideal la cultura del cuerpo delgado.

Solamente uno de cada 20 casos corresponde a un varón.

Existe un mayor riesgo de padecer anorexia nerviosa entre los pacientes de primer grado.

¿Qué puede desencadenar su inicio?

El comienzo de la enfermedad se relaciona a menudo con acontecimientos estresantes a nivel psicológico como pueda ser el abandono del hogar para ir a estudiar, una ruptura sentimental, un comentario desvalorizador sobre su imagen corporal por parte de amigos y compañeros, el inicio de dietas de adelgazamiento destinadas a mejorar la imagen corporal del adolescente etc.

¿Cuándo comienza a ser preocupante la pérdida de peso?

La identificación temprana y el tratamiento temprano de la pérdida de peso en la anorexia nerviosa, reducen la posibilidad de que el curso de la enfermedad derive en crónico y ponga en peligro incluso la vida.

Es importante por ello que se identifiquen lo antes posible los síntomas iniciales y sean puestos en manos del profesional psiquiatra.

“Todos los niños o adolescentes que pierden peso y no parecen mostrar la preocupación pertinente respecto a su aspecto físico, deben ser vistos por el psiquiatra”.

¿Cuáles son los síntomas de la anorexia nerviosa?

Síntomas y conductas necesarios para diagnóstico

Para hacer un diagnóstico de anorexia nerviosa, debemos evidenciar estos síntomas o estas conductas:

En algunos casos pueden faltar algunos de estos síntomas o conductas por lo que se hará un diagnóstico de anorexia parcial.

Síntomas iniciales de anorexia nerviosa y trastornos asociados, que pueden alertar a los padres o al médico

Cuando un adolescente sufre una perdida evidente de peso, sin que haya una patología médica que lo justifique, presenta un estado de ánimo deprimido, esta irritable, tiene insomnio, se retrae socialmente, si es mujer tiene amenorrea y si es varón ha perdido todo interés por el sexo … debe ser inmediatamente evaluado por el psiquiatra.

Es el psiquiatra quien diagnosticara si estos síntomas se deben a una depresión que debe ser tratada como tal, o forman parte del cuadro clínico de anorexia nerviosa. que denominaremos anorexia nerviosa en evolución.

También pueden observarse síntomas de un trastorno obsesivo-compulsivo (TOC), en relación con la comida o a otros temas. Los pensamientos relacionados con la comida ocupan la mayor parte del tiempo. Les gusta preparar la comida que luego no pueden comer, se sienten muy angustiados si tienen que comer en público, piensan continuamente en las calorías de cada alimento que van a ingerir etc.

Los signos físicos que consisten en una reducción de las constantes vitales, temperatura, presión arterial, pulso, respiración, etc., ello refleja el intento del organismo de conservar la energía ante la desnutrición. En lo demás, puede dar una apariencia de salud sin estarlo, sobre todo si la pérdida de peso ha sido gradual.

Tipos de anorexia nerviosa

• ANOREXIA NERVIOSA RESTRICTIVA: La perdida de peso tiene relación exclusivamente con el ayuno y/o el ejercicio excesivo.

• ANOREXIA NERVIOSA PURGATIVA: Durante el episodio de pérdida de peso, el individuo recurre con frecuencia a la utilización de purgas, como son la provocación del vomito, el uso excesivo de laxantes, diuréticos, enemas, etc. También son muy frecuentes los atracones, que se intentan compensar con vómitos autoprovocados.

Enfermedades con las que hay que hacer un diagnóstico diferencial

El paciente que ha perdido mucho peso sin causa médica aparente, debe ser interrogado en relación a los síntomas específicos de la anorexia nerviosa, pues ya hay una sospecha de anorexia nerviosa.

Las otras causas psicológicas de pérdida de peso del adolescente son:

• Depresión grave, donde se pierde realmente el apetito, pero no se tiene miedo a adelgazar, ni miedo a ganar peso.
• Fobia social, con aparición de conductas evitativas, pero no solo en relación en relación a la alimentación, ya que en la anorexia nerviosa las adolescentes pueden sentirse molestas y humillados de comer en público.
• Trastorno-obsesivo-compulsivo, el paciente presente obsesiones y compulsiones, pero todo ello no solo en relación con la alimentación.
• Trastorno dismórfico, con otras alteraciones además de las relacionadas con la silueta o el tamaño corporal.
• Bulimia, con atracones y conductas encaminadas a no ganar peso, pero mantiene el peso normal o incluso por encima de lo normal.

Consecuencias físicas de la pérdida de peso

• Amenorrea de mas de tres meses en las mujeres.  Esta se relaciona con la pérdida de peso, pero no siempre tiene exclusivamente relación con ello, pues en algunas jóvenes se inicia antes de haberse producido una pérdida importante de peso y persiste cuando el peso se ha normalizado.
• En las chicas que se provocan el vómito pueden aparecer erosiones dentales o cicatrices en el dorso de la mano.
• Reducción de las constantes vitales (hipotensión, hipotermia, bradicardia).
• Sequedad de piel, color amarillento de esta o aparición de un vello fino en cara o tronco que se llama “lanugo”.
• Hemograma: Leucopenia y anemia leve.
• Bioquímica sanguínea: Importantes alteraciones secundarias a la desnutrición o a los vómitos autoinducidos.
• Electrocardiograma: Bradicardia sinusal.
• Electroencefalograma: Alteraciones difusas consecuencia de las alteraciones hidro-electrolíticas.
• Resonancia Magnética Cerebral: Aumento del cociente ventrículo/cerebro, pero que se relaciona con la desnutrición.

Causa de la anorexia nerviosa

Enfermedad psicosomática

La etiología de la anorexia nerviosa tiene que ver con una alteración en los mecanismos psicológicos y su relación con lo corporal, por lo que es considerada una enfermedad psicosomática.

Los mecanismos psicopatológicos que pueden conducir a ella pueden ser muy diferentes, por lo que más que hablar de una sola anorexia nerviosa, deberíamos hablar del “grupo de las anorexias nerviosas”, considerando a esta más como un síndrome que como un diagnóstico.

La articulación de estos mecanismos con la inhibición de origen central de los sistemas neurobiológico cortico – hipotálamo – hipofisarios es muy estrecha. Es por tanto un error no preocuparse del adelgazamiento y de la amenorrea, como así mismo desde una lógica solo médica no tener en cuenta los factores psicológicos que se plantea en esta restricción alimentaria y síndrome neuroendocrino.

Psicodinamia

La relación con la pubertad es variable, ya que existen formas puberales y formas post puberales. Por lo que no siempre puede ser considerada como una hipocondría relacionada con la maduración puberal y sus conflictos.

En muchas ocasiones se trata de un individuo con gran desconocimiento de su cuerpo y que lo percibe como persecutorio por las proyecciones extra psíquicas pero intrapersonales que construyen una “paranoia intrapersonal”, y que está dominado por una gran avidez oral.

También se relaciona con un desarrollo emocional, en el que siempre se ha respondido a las demandas afectivas del niño con alimentos, por lo que este no desarrolla la capacidad de conocer sus necesidades de hambre, cansancio, sueño.

Los mecanismos evidentes mecanismos obsesivos que aparecen, en realidad son secundarios. Lo primario es que el cuerpo es percibido como algo persecutorio y el alimento como algo que engorda y amenaza la integridad psíquica.

En ocasiones la mala estructuración del conflicto edípico conduce a una regresión narcisista que pudiera considerarse una “psicosis fría”.

Las fantasías y conductas de omnipotencia tienen relación un intento negador de la dependencia madre – hijo. La sensación de hambre está muy erotizada.

Personalidad

Desde el punto de vista de la estructuración psíquica, podemos encontrar una “Anorexia Mental Primaria” ya surgida en las primeras fases del desarrollo. O por el contrario una Anorexia Mental Secundaria que puede aparecer en cualquier tipo de personalidad generando un episodio transitorio de fácil resolución. Que no será más que un incidente de la crisis de la adolescencia.

¿Cuál es su gravedad?

Pronóstico

Si la anorexia nerviosa es tratada en su fase inicial puede recuperarse después de este episodio único sin secuelas físicas o psicológicas. Pero si no es así o se acompaña de factores psicopatológicos más graves, pueden evolucionar con episodios de frecuentes recaídas o sufrir un deterioro crónico a lo largo de años.

La tasa de mortalidad de los casos más graves, que son los que necesitan ingreso hospitalario, se sitúa en un 10% de ellos. Esta es superior a la de cualquier otra enfermedad psiquiátrica incluida la depresión. La muerte se produce por inanición, problemas cardiacos, desequilibrio hidroelectrolítico y suicidio.

Indicadores de gravedad

La gravedad de la desnutrición y por tanto el riesgo físico en la anorexia nerviosa se mide calculando el Índice de Masa Corporal (IMC), índice que va disminuyendo conforme la desnutrición es mayor.

1.- Gravedad leve: IMC menor de 18

2.- Gravedad moderada: IMC menor de 17

3.- Gravedad grave: IMC menor de 16

4.- Gravedad extrema: IMC menor de 15

¿Cuándo hay que ingresar a un adolescente con Anorexia nerviosa?

Cuando se den cualquiera de estas situaciones:

• IMC menor de 14
• Pérdida de peso muy persistente en los tres últimos meses.
• Rechazo manifiesto a alimentarse a pesar de las pautas de que se han dado para la alimentación en el domicilio.
• Importantes alteraciones biológicas como puedan ser la bradicardia, la hipotensión o los trastornos hidroelectrolíticos.

¿Cómo prevenir la anorexia nerviosa?

Las señales de alerta que nos avisan del posible inicio de la anorexia nerviosa son:

• La pérdida de peso de un niño o un adolescente, que no está preocupado por el hecho de estar delgado, pero que teme el aumento de peso de forma continuada.
• En la anorexia nerviosa puede producirse una amenorrea antes de que haya una pérdida de peso sustancial, y puede persistir luego a pesar de que se recupere un peso normal.
• La anorexia nerviosa no será un diagnóstico de exclusión pues tiene unos síntomas y signos específicos de este trastorno.
• Los desequilibrios electrolíticos, los trastornos de control de los impulsos, la labilidad emocional, el abuso de alcohol o drogas y una mayor actividad sexual se producen principalmente en la anorexia nerviosa de tipo purgativo.